Decálogo rolero
Decálogo del Rol Polero
Estas normas no son de obligado cumplimiento, sino una guía altamente recomendada para seguir en el Rol, y así fomentar el buen rollo e intentar evitar malos entendidos.
- Sé coherente. Tu eres el personaje. Puedes llevar más de un personaje, si quieres, pero recuerda quien es quien
- Sé respetuoso. El sentido común prevalece. No es lo mismo rolear una pelea o una bravuconada que simple y llanamente insultar a alguien.
- Ten presente tus límites. Tú no eres el único que rolea. Entre tus personajes puedes hacer cualquier cosa, pero cuando tocas personajes de otros jugadores no puedes narrar sus acciones. Puedes narrar las percepciones de otros jugadores (Juan: "David y Paloma ven como se acerca Juan a caballo, con el pecho al aire"), e incluso cosas que pasan a otros personajes (Juan: "Juan ataca a David, hiriéndolo antes de que éste pueda defenderse"), pero para esto antes debes hablarlo aparte con esos otros jugadores, explicarles que vas a usar sus personajes, y qué les pasará. Ellos deben tener la última palabra de lo que les pase a sus personajes.
- No se colabora. La historia se desarrolla a múltiples manos, pero no se construye nada en comité. Nada mataría al rol mas rápido que consensuar los hilos. Todos tenemos carta blanca para desarrollar la historia según nuestros intereses, dentro de unos límites marcados. Acepta los cambios introducidos por la gente, del mismo modo que quieres que los demás acepten los cambios que introduces tu. Hakuna matata.
- Ten presente el tema. La partida tiene un tema bien definido. No hay elementos fantásticos, mas allá de algunas referencias jocosas a la cultura polense y/o popular.
- Ten presente los límites de tu personaje. Cada personaje forma parte de un mundo mayor. Como jugador, tu puedes saber qué pasa en los confines del norte, pero tu personaje está tan lejos que no tiene ni idea. De la misma manera, tu personaje puede tener información falsa, pero creerla perfectamente. En el momento de jugar, como jugador tienes capacidad para decidir si algo es objetivamente cierto o simplemente algo que tu personaje cree verdadero. Déjalo claro en el hilo, o déjalo deliberadamente confuso para que alguien más construya sobre eso.
- El cuarto muro es bonito, no lo rompas por las buenas. Si estás roleando, rolea. Si estás haciendo cualquier otra cosa, hazla. No mezcles churras con merinas, a no ser que quieras aclarar alguna consecuencia fuera de personaje. En ese caso, deja bien claro qué es rol y qué no lo es, posiblemente haciendo uso de distintos tipos de fuente, colores, tamaños... Romper el cuarto muro a menudo hace los hilos confusos y el juego deja de ser divertido.
- Hay permadeath. Esto no es Marvel, dónde las puertas del Otro Mundo parecen ser giratorias. Resucitar algún personaje, o el típico "No estaba muerto, que estaba de parranda" es una manera de engañar a los demás jugadores, cosa que no es justa. Si un personaje muere, déjalo descansar en paz y créate otro. Si quieres simular la muerte de uno de tus personajes, que no matarlo, déjalo claro. Te dejamos romper el cuarto muro para eso, pero no te acostumbres.
- Intenta ser constructivo. Siempre intenta dar pié a que otros jugadores participen en una escena determinada, o crear tal evento o circumstáncia que dé juego.
- Diviértete. El rol es un objetivo en sí. Simplemente desarrolla tus personajes en el mundo creado por la comunidad. No te obceques en otros objetivos y disfruta.